Hay que tener cuidado con la financiera de las marcas. Ahora, la venta de un coche se ha convertido, además de la venta del coche en sí misma, en otro producto más para ganar dinero.
Quieren parte del pastel que se están llevando los bancos.
En mi caso desestimé cualquier financiación de la marca, ya que lo que no pagas al principio, te lo pagas después con creces.
La única opción valorable es, financiar el mínimo tiempo y la mínima cantidad de dinero, pero incluso suele ser algo peor que
un personal de un banco.
Cierto es que en ocasiones la marca es más permisiva a la hora de darte el préstamo, pero le interesa doblemente, por los intereses que aplican y si al final no puedes pagar el coche, se quedan con él y vuelven a hacer negocio.
Un banco va a negociar contigo más, porque no quiere el coche para nada.